Si existe algo por lo que siempre podré estar agradecida es por los amigos que tengo, desde los que veo a diario hasta aquellos que veo con suerte una vez al año.
Esta vez siento que debo escribir acerca de un amigo muy especial... siempre, desde que nos conocimos nos hemos llevado bien, él es muy juguetón y bromista, al igual que yo, siempre nos divertíamos platicando, pero no dedicábamos tiempo de más para conocernos. Hasta estas vacaciones, que mi mejor amigo estaba lejos y los demás en realidad no recuerdo dónde estaban...
en esos momentos me sentía triste, confundida, estúpida, no querida... conflictuada, como siempre y él, a él no le importaba que yo solo tuviera quejas, no le importaba que solo llorara, me escuchaba (me leía, más bien), me tranquilizaba... sólo con hablar con él lograba ver las cosas desde otra perspectiva, desde la cual no eran tan graves y se podía seguir viviendo.
En poquito tiempo logró inundarme con su cariño, sus ideas locas y sus chistes pelados y como bonus: ¡¡¡¡¡le gusta leer mi blog!!!!!
su nombre... JESUS
pero no crean que me volví fanática religiosa, mi amigo se llama Jesús Galindo jajajajajaja
él es Chuyito, y en esta imagen se le puede observar pensando en cómo salvará al mundo.
Cumplió años recientemente y no sé si le pude demostrar bien lo mucho que lo quiero y lo mucho que agradezco que siempre esté ahí...
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